Resumen:
La Unidad Académica de Letras cumple treinta y cinco años. Desde 1987, fecha de su arranque de actividades, fue una opción terminal después de algunos semestres de tronco común con la Filosofía y la Historia. Después vendría la Antropología, pero esta siempre fue de formación independiente. A partir del año 2000 las escuelas devinieron en unidades académicas, encuadradas en una reforma universitaria que nunca llegó a cuajar del todo. Ya con este carácter muchos de sus esfuerzos fueron a consolidar la Licenciatura en Letras, lo cual se logró en 2005, conforme a exigencias de aquel momento, con la acreditación de nivel 1 de CIEES (Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior). Dicho nivel se ha mantenido hasta el momento actual y se ha logrado cada vez con mayor solvencia, aunque ahora simplemente se acredita o no al programa evaluado. En 2003 arrancó la Maestría en Enseñanza de la Lengua Materna, la cual mutó a Maestría en Competencia Lingüística y Literaria en 2019 y logró su ingreso al Programa Nacional de Posgrados de Calidad en 2021, nuevamente conforme a exigencias de aquel momento. Recalcamos la palabra exigencias de la época porque sin duda un programa educativo
o una Unidad Académica implica numerosas tareas que van más allá del registro dentro de un sistema sujeto a y sujetante de determinadas reglas