Resumen:
Con el inusitado crecimiento de las remesas familiares recibidas en México -que en el año 2006 llegaron a 23 mil 741 millones de dólares, según el Banco de México y que para el 2007 alcanzaron los 23 mil 979 millones (La Jornada, 31 enero, 2008)- sigue generándose un amplio debate sobre los impactos de éstas en el desarrollo económico del país y sus diferentes regiones.
Durante los últimos años el fenómeno migratorio internacional hacia los Estados Unidos se ha masificado prácticamente a todo el territorio nacional como reflejo de la precariedad económica del país y de la cada vez más creciente integración económica entre ambos países. Esta situación ha provocado, según el Consejo Nacional de Población (Conapo) (El Universal,26 diciembre 2007), un proceso nunca visto en la historia demográfica de México respecto al ritmo de crecimiento de la población nativa de México radicada en Estados Unidos en las últimas tres décadas del siglo pasado.