Resumen:
Veintidós años después de una integración asimétrica y subordinada de México con la economía de Estados Unidos, nuestro país realiza en promedio el 80% de su comercio exterior con aquel país, las exportaciones son mayoritariamente productos petroleros, maquila y autos ensamblados de corporaciones norteamericanas. Así, los pronósticos del TLC como palanca del crecimiento y desarrollo económico nacional, no se cumplieron, creció significativamente la inversión extranjera directa, fundamentalmente especulativa, las exportaciones se incrementaron en seis veces con productos naturales (petróleo y minerales) y la maquila y ensamble de escasa innovación tecnológica y reducida integración con el mercado interno y las cadenas económicas regionales. El crecimiento económico y del empleo ha sido insuficiente para responder a la demanda de 1.2 millones de nuevos empleos cada año y reducir la migración internacional que se acelera con el funcionamiento del TLC en México (10 millones de expulsados del campo mexicano).