Resumen:
El trabajo contribuye a la salud del individuo al permitirle desarrollar sus capacidades físicas y
cognitivas, ayuda a cubrir sus demandas socioeconómicas, además de que también permite el
desarrollo de una comunidad; pero el trabajo no solo es fuente de satisfactores, también puede
causar daño a la salud, por las condiciones sociales y materiales en que se realiza, los más
evidentes son los accidentes del trabajo. En un ambiente laboral siempre van a presentarse
riesgos, existen profesiones o actividades las cuales están más propensas a sufrir algún tipo de
daño ya sea físico o psicosocial; el personal sanitario, por la prestación de servicios se considera
dentro de las profesiones con mayor riesgo y no se encuentra exento de padecer algún daño a su
salud. El riesgo se define a partir de las probabilidades de que ocurra un evento e influyen en
éste la susceptibilidad de la persona y el grado de exposición a los factores que aumentan el
riesgo1, los daños a la salud se podrán manifestar de manera aguda o crónica debido a la
bioacumulación por el tiempo de exposición.
Existen organizaciones mundiales que se dedican al estudio de estos riesgos laborales y
que se refieren a todos los ámbitos de trabajo, lo que sirve de referencia para cualquier área
laboral. La profesión que se dedica específicamente a la prevención y control de los riesgos
originados por los procesos de trabajo es la higiene industrial, dentro de sus objetivos están la
protección y promoción de la salud de los trabajadores; está también la salud ocupacional o salud
en el trabajo una disciplina que identifica, evalúa y diseña estrategias para controlar y prevenir
los riesgos a los que está expuesto el trabajador de la salud.
En una unidad hospitalaria existen servicios de atención que demandan un mayor nivel
asistencial por parte del su personal; las condiciones biológicas, materiales, psicológicas, sociales
y ambientales, influyen para un mayor desgaste en el personal de enfermería debido al quehacer
de su profesión que es la de brindar cuidados y atención directa a los pacientes, están expuestas
continuamente a una serie de riesgos laborales, físicos, químicos, biológicos, ergonómicos y
psicosociales.